Consejos de viaje
De todas las regiones italianas, el Valle d'Aosta es la más pequeña, fronteriza con Francia y Suiza. Esto le brinda un paisaje único de los Alpes y el majestuoso Monte Bianco, inigualable en toda Europa. Courmayeur concentra el mayor número de turistas, especialmente alpinistas y esquiadores.
Las pistas de esquí son el gran atractivo del Valle d'Aosta para todo turista amante de los deportes de invierno como el patinaje sobre hielo o el snowboard, pero en la ciudad de Pont Saint Martin descubriremos además un pequeño legado histórico como su puente romano o la puerta simbólica por la que se accede al Valle de Gressoney. En la provincia encontramos más de 80 construcciones: fortalezas, torres, murallas y residencias de la antigua época feudal, entre las que destaca el Castillo de Fénis de la familia Challant.
La gastronomía regional es variada y creativa, con gran presencia de carne como el estofado, la carne de res, la carbonada o la mocetta. Los embutidos son exclentes, destacando el jamón de Bosses. Y los quesos no se quedan atrás: la Fontina DOP o el Valle d'Aosta Fromadzo son excepcionales.
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